Copa LEB Plata: Óbila vs Marín
- @ocbista y @m_jordan9
- 22 ene 2016
- 10 Min. de lectura
Mañana sábado, a las 19:00, se disputa el primer título de la temporada en las competiciones FEB, la Copa LEB Plata. Será en Ávila, en el CUM Carlos Sastre, donde el Carrefour El Bulevar de Ávila recibirá al Marín Ence Peixegalego. Los dos mejores equipos de la primera vuelta, cara a cara en un partido que ilusiona a los aficionados al baloncesto FEB. En ZonaOCB queremos informar sobre esta gran final como se merece y por eso hemos elaborado estadísticas propias, recopilado todo tipo de datos, apostamos por las que creemos que serán las claves del partido e incluso contamos con la colaboración de un entrenador de LEB Plata cuyo equipo se ha enfrentado recientemente a ambos finalistas.

¿Como llegan?
El azar ha querido que el partido se dispute tan sólo una semana después de que ambos equipos se vieran las caras en Marín, en un partido en el que los gallegos se impusieron con facilidad (101-80), encaramándose además al liderato, pues el basket average es suyo (habían perdido 64-62 en el partido disputado en Ávila, en la jornada 2).
Marín Ence Peixegalego, insistimos, es el nuevo líder de la LEB Plata, con 11 victorias y 4 derrotas, mismo balance que tiene Carrefour El Bulevar de Ávila, que fue líder en la jornada 6 y de la 9 a la 14 y que sólo se ha visto por detrás de Marín tras la última jornada. Ambos aventajan en una victoria al tercer clasificado, el Fundación Lucentum.
Marín Ence Peixegalego empezó la temporada con una derrota en casa, ante Araberri (73-77), es decir, ante el mejor visitante de la categoría. Desde entonces ha permanecido invicto en su feudo. A domicilio ha perdido tres veces, las dos primeras ante los equipos que han ganado todo en casa: además de la citada derrota en Ávila en la jornada 2, volvió a caer en la 5 ante Lucentum y en la 13 en la pista del Clínicas Rincón. Así, estuvieron invictos entre la 6 y la 12, y sólo han perdido un partido de los últimos 10.
Carrefour El Bulevar de Ávila cuenta por victorias todos los partidos disputados en su pista. Las cuatro derrotas han llegado por tanto a domicilio: en la jornada 3 cayeron de forma sorprendente en la pista del Simply Olivar (93-80), en la 7 en Cambados ante Xuven (77-69) y las dos últimas muy recientes, en la 13 en casa de Araberri por un abultado 95-66 y en la 15, como hemos visto, ante el propio Marín (101-80). Estas dos últimas derrotas tienen en común que el equipo abulense recibió un duro parcial en cada una de ellas, encajando 39 puntos en el tercer cuarto en Vitoria y 38 en el segundo en Marín.
Banco de datos
Carrefour el Bulevar de Ávila es el segundo mejor equipo en casa de la liga, empatado con Lucentum pero con peor basket average (7 victorias en 7 partidos, +61). Marín Ence Peixegalego es el segundo mejor visitante, con 5 victorias en 8 partidos y un balance de +3.
Marín es el 2º máximo anotador de la liga con 79.3 pt por partido, mientras que Óbila es 8º con 74.6. La alta anotación de Marín tiene su origen en la elevada eficiencia ofensiva, la mejor de la liga, con 107 puntos anotados por cada 100 posesiones, mientras que en este apartado Óbila también se encuentran en mitad de la tabla con 98 puntos anotados cada 100 posesiones.
Óbila encaja 71.9 puntos por partido (4º que menos), frente a los 74.1 que recibe Marín, 7º. También aquí quedan reflejadas las eficiencias defensivas de uno y otro, pues mientras que Óbila apenas encaja 93 puntos cada 100 posesiones (2º mejor), Marín recibe 100 y es 9º.
Tanto Óbila como Marín están entre los equipos con peor porcentaje de acierto en tiro de dos (47.5% y 48.7% respectivamente), superando sólo al colista Viten Getafe. En cambio Marín presenta la mejor tasa de acierto en tiro de tres de la liga, con un 40.1%, mientras que Óbila tiene también un buen 34.6% (5º).
Los porcentajes del párrafo anterior se traducen en dos datos muy significativos: por una parte, Marín es el equipo que mas triples ha anotado a lo largo de la liga, con 143 (9.5 por partido), mientras que Óbila es tercero con 120 (8 por partido); por la otra, ambos son los dos equipos con menos canastas de dos anotadas (tras Getafe), con 17.4 por partido para Óbila y 18.2 para Marín.
En cuanto a asistencias ambos equipos se encuentran parejos, con 11 por partido y 15 por cada 100 posesiones, lo que les sitúa entre los equipos que menos destacan en este apartado.
Tampoco destacan ninguno de los dos por el número de faltas cometidas, 20 por partido, aunque sí se sitúan entre los equipos que más reciben: casi 22 colocan a Marín como el líder en este campo, con Óbila en tercera posición (21 faltas recibidas por partido).
En cuanto a la capacidad reboteadora, sí que hay grandes diferencias, pues Óbila es el tercero más fuerte (35.8 totales), mientras que Marín es el que menos rebotes captura (29.1), lo que se traduce en que Óbila se hace con el 54% de los rebotes disponibles en sus partidos (3º), por sólo el 47.5% de Marín (12º). Si detallamos en función del tipo de rebote, Óbila es el líder en el defensivo (74.5%) y 4º en el ofensivo (31.9%); por su parte Marín es 6º en rebote defensivo (69.9%) pero es el tercer peor equipo en el ofensivo (27.2%).
En cuanto al ritmo de juego, nos encontramos ante los de los equipos con menor número de posesiones por partido, 74.1 para Óbila y 73.6 para Marín, superando sólo a Getafe y Lucentum.
¿Como fueron sus enfrentamientos durante la liga regular?
Ya hemos visto que ambos equipos ganaron el partido disputado en su pista: 64-62 para Óbila en el Carlos Sastre y 101-80 para Marín en A Raña, logrando la victoria cada uno de ellos en el partido que se desarrolló de forma más próxima a sus intereses: con bajo tanteo se impuso el equipo de David Mangas mientras que jugando a muchos puntos la victoria fue para los de Llorente. En ambos partidos Óbila demostró su fortaleza en el rebote, consiguiendo más que su rival. También quedó claro el peligro exterior de Marín, que tanto en los dos duelos anotó más triples, especialmente en el de la semana pasada, en el que logró 15, con un 58% de acierto.
Los protagonistas: las primeras unidades de ambos finalistas
Carrefour El Bulevar de Ávila
Marzo: Promedia 31', 11.2 pt, 2.9 rb y 4.1 as. Val: 10.3. Tercer máximo asistente de la liga.
Mbamalu: Promedia 25', 10.2 pt, 3.4 rb y 1.6 as. Val: 6.7.
Toledo: Promedia 25', 10.6 pt, 4.7 rb y 1.1 as. Val: 9.6.
Nikolic: Promedia 26', 9.3 pt, 9.6 rb y 0.9 as. Val: 13.3. Cuarto máximo reboteador de la liga,
Sebirumbi: Promedia 27', 10.2 pt, 6.5 rb y 1.1 as. Val: 13.
Entre los cinco suman el 66% de los puntos, el 68% de los rebotes, el 76% de las asistencias y 71% de la valoración de su equipo. Nikolic se ha perdido tres partidos; Sebirumbi y Toledo, uno. Esta primera unidad permanece en pista el 62% de los minutos disputados hasta ahora.
Marín Ence Peixegalego
Ferreiro: Promedia 26', 4.5 pt, 1.9 rb y 2.3 as. Val: 3.6.
Rogers: Promedia 33', 18.3 pt, 2.7 rb y 2.9 as. Val: 15.7. 46.5% de acierto en T3 con 3.5 anotados por partido. Segundo máximo anotador de la liga y tercer jugador con mejor % de T3.
Green: Promedia 27', 15 pt, 6.5 rb y 1.2 as. Val: 17.7. Lidera el ránking de recuperaciones y de mates por partido. Es el quinto jugador con mejor valoración de la liga.
Navajas: Promedia 24', 9 pt, 3.5 rb y 1.3 as. Val: 9.8.
Pantín: Promedia 30', 12.7 pt, 6.9 rb y 1.3 as. Val: 15.3.
Entre los cinco suman el 75% de los puntos, el 74% de los rebotes, el 79% de las asistencias y el 79% de la valoración de su equipo. Los cinco han jugado en todos los partidos y están en pista en el 70% de los minutos disputados hasta ahora.
Las claves del partido
Pizarras de alto standing. Desde ZonaOCB nos olíamos que iban a hacer algo grande, y tuvimos la suerte de entrevistar en pretemporada a ambos entrenadores. Ambos son técnicos de la casa, con años de evolución en su puesto, y de los cuales se sabe que están sobradamente capacitados. Javi Llorente, cuatro años ya de entrenador principal de Marín, nos desgranaba a su equipo en verano; algo que también hacía David Mangas en pretemporada con su equipo, al que dirige por tercer año como entrenador principal. Dos hombres de club, que llaman a las puertas de categorías superiores, bien con sus equipos o de otra forma.
Ritmo de juego. Con dos precedentes en forma de partidos de liga regular totalmente diferenciados desde ZonaOCB tenemos la creencia que será un partido como el de la segunda jornada. Un tanteo medio, de emoción, igualdad y tensión. La defensa presionante de Marín que da problemas hasta a equipos de Leb Oro como se vio en pretemporada, y la férrea actitud de “en mi canasta no entran” de los abulenses, crearán una atmósfera de partido donde creemos que los porcentajes de tiro no serán espectaculares, y las pérdidas de balón pueden ser un factor decisivo. ¡Ver, veremos!
Pareja in-out. Marín tiene una pareja de pívots con experiencia en Oro que crea muchos problemas. Un experimentado Navajas, abre las defensas con su muñeca, creando espacios en los que Pantín se mueve a la perfección posteando. Y a la inversa, las ayudas sobre Pantín dentro son aprovechadas por los tiradores de Marín a la mínima.
Duros al rebote. Si algo tiene bueno Óbila es su capacidad para rebotear. Se sabía que Sebirumbi era todo fortaleza en el poste bajo, pero la irrupción de una promesa como Nikolic, joven valor muy coordinado para su altura acompañado de una buena muñeca, y el saber estar de Asanin, ha hecho del rebote uno de sus puntos fuertes. Si a esto le sumas Ramasauskas, con sus 211 centímetros de techo, y disponer de una batería de tres altos que ya quisieran muchos equipos, está todo dicho.
Los tocados. En una final todos quieren jugar. Se sabe que Oubiña por Marín dejará atrás sus problemas, y que Óbila que lleva toda la temporada con jugadores de bajas por lesión contará con un Lobo ya recuperado, a la espera de que todos los tocados estén para jugar.
Bloque por encima de todo. Con un quinteto muy marcado (más las aportaciones de Oubiña, Adón y Rey), el bloque de Marín se puede quedar algo corto en rotación tras las salidas de Darío Suárez y Koyanouba, que siguen sin cubrirse. A un solo partido a lo mejor no se nota tanto como si fuera una serie, pero es que el Óbila ha acabado por conformar un equipo de doce jugadores que es un rodillo durante los cuarenta minutos de cada partido y del que no sabes quien te puede hacer daño, incluidos los últimos refuerzos García o Jiménez.
Pareja de Oro. Episodio I. Cuando un americano repite en un equipo, está claro que hay una adaptación y un sentimiento de encontrarse a gusto enorme; si además es un jugador de calidad que marca diferencias, lo que ganan el equipo, el jugador y la competición se agranda. Hablamos de Gabe Rogers, un jugón en toda regla, que no encontró sitio en Palencia en su primera experiencia en Europa, y que sin embargo, en Marín ha encontrado su lugar. Sus puntos, su pegajosa defensa, su manejo del balón, sus rachas de triples y su liderazgo hacen de él una de las estrellas de esta final. Pero Óbila no se queda atrás, y tiene preparado su antídoto, en la figura de Álvaro Lobo, el combo guard madrileño vuelve tras su lesión, y sabe que se debe pegar con superglue a Rogers para aumentar los opciones de su equipo, además de ser un peligro más en ataque.
Progresión en la dirección. De Carles Marzo siempre guarda buen recuerdo la afición del Unión Financiera Oviedo, que veía en él un jugador joven pero de gran sobriedad. Su progresión ha sido evidente, y ahora es uno de los pilares de este Óbila, un jugador coral, que siempre busca la mejor opción a sus compañeros, pero que puede mirar al aro, y aprovechar su ventaja física respecto al base del PeixeGalego, Manu Ferreiro. Además es lícito recordar que Marzo es un jugador experimentado en estas lides, con su tercera presencia en una final de Copa Plata, y que tendrá sus minutos de descanso gracias a García y Lobo.
Pareja de Oro. Episodio II. Como si de una saga se tratase, tras Gabe Rogers, la directiva de Marín decidió apostar por Javonte Green. Se sabía que era un jugador de calidad sobrada, pero se tenía dudas sobre su tiro en el ámbito profesional. Pero en media temporada ha disipado cualquier duda. Su fuerza, y velocidad le sirven para romper defensas, y su juego por encima del aro ya es conocido en todos los lados con unos saltos en forma de mates que levantan a los espectadores de su sitio. A eso se le unen las ganas de trabajar y un tiro más que correcto, que unido a su capacidad defensiva, traducido en unas manos rápidas para robar el balón, y la ayuda en el rebote, provocan que sea un jugador que debe mirar a categorías superiores.
Juventud divino tesoro. No es por lanzar un guiño a nuestros compañeros de @enfermosbasket de lo bien que se trabaja en la región de Murcia, o por avisar como en Cáceres Baloncesto estarán apoyando a la marea verde por su jugador cedido. No es por eso, sino por su juego, por lo que destacamos a Carlos Toledo. Se ha hecho imprescindible para Mangas, que simplemente recompensa su trabajo, y el jugador ha aprovechado para pulir sus puntos débiles y mejorarlos, a la vez que adquiere madurez y protagonismo. Su juventud no quita para que se presuponga como uno de los actores principales de esta final, y que ayudado a la perfección por Young y Jiménez sean los encargados de parar a Green.
Los espontáneos. Son esos tipos de jugadores que no atraen los focos principales, se sabe de lo que son capaces, y al final de los cuarenta minutos están en todos los titulares. Candidatos pueden ser varios, desde un Goyo Adón, el alero dominicano de Marín, capaz de todo y que ya ha tenido partidos brillantes esta temporada, pasando por los de Óbila, como puede ser el escolta americano-nigeriano Mbamalu, un todoterreno capaz de cambiar con su juego traducido en puntos el sino de su partido, la versatilidad de un Young muy mejorado, o incluso Berni García capaz de coger rachas anotadoras. Ojo a ellos, porque en alguno puede que este la clave de la final.
Y para completar... la opinión de alguien que los conoce muy bien
Hay un equipo de LEB Plata que ha recibido en este mes de enero a ambos finalistas, el Sáenz Horeca Araberri de Sergio Jiménez, que ganó el día 2 a Óbila (95-66), para caer una semana más tarde ante Marín (80-82). En ZonaOCB creemos que nadie mejor que Sergio para darnos una visión experta sobre la final:
“Marín Ence Peixe Galego tiene mucho potencial físico y varios jugadores con capacidad de hacerse sus propias canastas (Rogers, Green y Pantin especialmente), que en una final o momentos importantes es clave. Carrefour el Bulevar de Ávila por su parte es un bloque muy compacto con gran rigor táctico, y capacidad de generar muy buenas opciones de tiro como equipo.
La clave puede ser el control de las emociones, que se traduce en minimizar los errores defensivos y las perdidas de balón en ataque, quien sea capaz de hacerlo tendrá mucho ganado. Aunque Marín parece que llega en mejor estado de forma, Ávila en casa se esta mostrando muy fuerte, por lo que no tengo un favorito para esta final”
Hasta aquí la previa de la Copa Leb Plata, sólo esperamos poder disfrutar de un gran partido con dos equipos que seguro se dejarán el alma y brindarán un gran espectáculo.
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